Ecopsicología/Dios y nosotros Dios y nosotrosDios no es un hombrecito invisible que vuela, como Lo imaginan en las sectas religiosas primitivas. Dios es el Océano Universal de la Conciencia. ¿Cuál es Su tamaño? ¿Podemos imaginar un año luz? Es la unidad astronómica para medir el espacio cósmico, la distancia que recorre un rayo de luz durante un año terrenal. Los astrónomos encontraron objetos en el universo que están a mil millones de años luz de la Tierra. Pero Dios es más grande aún. Porque el universo es infinito. ¡Y Él es INFINITAMENTE GRANDE! Por más que nuestro planeta nos parezca gigante, cuando caminamos o nos trasladamos sobre su superficie en algún medio de transporte, en realidad, es infinitamente más pequeño en comparación con la Grandeza del Océano de la Conciencia del Creador. La Tierra es solamente una de las numerosas «islas» de materia, creadas por Él en el espesor del Océano. Aquí, así como en muchos otros planetas del universo, se formaron las condiciones idóneas para la vida y para la evolución de los cuerpos orgánicos. En los cuerpos de las plantas, de los animales y de las personas tiene lugar el desarrollo de la Conciencia Universal. Cada uno de nosotros, los humanos, es una partícula, una condensación de energía, una conciencia que, en su pasado, se desarrolló en los cuerpos vegetales, animales y luego humanos y ahora debe, en su fase actual, esforzarse por su autoperfeccionamiento. Debemos tratar de transformarnos de tal manera que seamos dignos y podamos sumergirnos en la Morada del Creador y unirnos con Él. Entonces obtendremos la Tranquilidad (o Calma) definitiva en el Éxtasis Supremo de la Unión Eterna con Él, siendo Él. Sobre este propósito Dios nos habla constantemente por medio de Sus Mesías que encarnan una y otra vez. Pero resulta que las personas, en su mayoría, no son capaces de comprender y conservar en la memoria esta Verdad y a menudo olvidan, alteran y tergiversan las Enseñanzas de Dios enviadas a ellos. De esta manera se forman las sectas religiosas [6]. En el Infinito Océano de Dios, la existencia de cada planeta material tiene su duración determinada. Luego, para este planeta llega «el fin del mundo». Aquellas conciencias (o almas) que no alcanzaron la Unión con Dios se desintegran. Y Las Que la alcanzaron Lo enriquecen a Él con ellas mismas, cumpliendo totalmente el significado de su vida y realizando su amor hacia Él en la Unión.
|
| ||||||||
|